Esta película narra la historia de Desmond Doss, un
médico de guerra durante la Segunda Guerra Mundial, quien se opuso a matar a
otras personas durante la batalla, e incluso a tocar un arma. Luego de su
coraje (después de tanto que lo llamaron “gallina”), se convirtió en el primer
hombre en recibir una Medalla de Honor sin siquiera jalar el gatillo; además,
recibió la gratitud y el aprecio de los 75 hombres heridos en batalla, a los
cuales salvó.
Sin duda alguna esta película se ha ganado un puesto
importante en los Oscar’s. Primero que nada, su guión está muy bien
estructurado; la construcción del personaje principal es tan bien elaborada,
que mientras ves la película sientes todas sus penurias, su cansancio, su
compasión y su fe. La manera en la que Andrew Garfield interpreta a Doss es
excelente, sin duda este actor se ha convertido en uno de los mejores.
Mel Gibson se lució trayendo esta historia a la gran
pantalla; la dirección y la fotografía son muy brutales. La esencia bélica y la
espiritualidad cristiana hacen una muy buena combinación en este film. El
mensaje claro que transmite la historia es nunca renunciar a tu fe ni a tus
creencias (y esto se demuestra claramente en el personaje de Doss, quien, aún durante la batalla, siempre llevaba
consigo su Biblia).
Esta gran pieza cinematográfica cuenta con 6 nominaciones
a los Oscar’s:
- - Mejor Película
- - Mejor Director (Mel Gibson)
- - Mejor Actor (Andrew Garfield)
- - Mejor Edición
- - Mejor Mezcla de Sonido
- - Mejor Edición de Sonido
Espero que gane más de 1 en la ceremonia, porque además,
ha ganado premios en otras ceremonias como los BAFTA, los SAG Awards y
los Critics’ Choice Awards. Además ha
sido catalogada como la mejor película de Mel Gibson desde Braveheart (1995).
Recomiendo esta película a los amantes de las historias
reales, ambientadas en la guerra, y con un buen mensaje motivador.
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la
convicción de lo que no se ve”. –Hebreos 1:11
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